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Ya estamos de lleno en primavera y vamos dejando atrás, poco a poco, la cuarentena que nos ha tenido más de dos meses sin salir prácticamente de casa. Empezamos a salir a dar paseos, a disfrutar de una terracita con amigos y familiares, y además de tomar las medidas necesarias para evitar el contagio por coronavirus, es momento de prestar atención a nuestra piel.

¿Sabías que la mayor parte de las manchas que aparecen en nuestra piel están relacionadas con la exposición al sol? Y es que aunque el sol nos aporte vitamina D y sea beneficioso para nuestra salud, siempre debemos tomarlo con precaución.

Entonces, ¿qué tenemos que tener en cuenta para evitar las manchas en la piel?

  • Toma el sol con cuidado, y siempre con un fotoprotector adaptado a tu tipo de piel. Recuerda que no todas las personas necesitamos el mismo factor de protección, por lo que debes escoger uno para ti, aplicar antes de la exposición al sol (cada día) y reaplicar cada dos horas si vamos a estar expuestos directamente.
  • Evita las horas de mayor radiación: esto es muy importante, ya que aunque nos echemos crema para el sol, hay horas del día en las que los rayos son más perjudiciales para nuestra piel. Si es posible, no te expongas directamente al sol (en verano) entre las 12 y las 16h.
  • Si te gusta tomar el sol, empieza poco a poco: sabemos que estás deseando tumbarte al sol y coger un poquito de color, pero hazlo paso a paso. Lo mejor es que los primeros días alternes el sol con la sombra en periodos cortos, hasta que tu piel se acostumbre, y siempre con protección.
  • Elige siempre el mejor producto: hay veces que lo barato sale caro, por eso desde la farmacia te recomendamos que siempre escojas un fotoprotector de calidad, y si no sabes cuál es mejor para ti, ¡nosotros te ayudamos!
  • Si tomas medicación, consulta a tu médico: hay medicamentos que no son compatibles con el sol y que no se recomiendan tomar si vamos a pasar un día de playa. Si es tu caso, habla con tu médico y pregúntale si puede afectar a tu piel y debes evitar la exposición, o son compatibles.

Y recuerda, si notas que a pesar de todos estos cuidados aparece una mancha en tu piel que antes no existía, préstale atención y si fuera necesario, consulta con tu médico. Él decidirá si es importante que lo revise un dermatólogo o no, pero más vale prevenir que curar.