En invierno es frecuente que nos pongamos enfermos, y esto es debido, en numerosas ocasiones, a que nuestras defensas bajan. Pero, ¿qué podemos hacer para evitarlo? ¿Hay algo que podamos tener en cuenta? Desde luego que sí, y en este post queremos daros unas pautas para que vosotros también lo consigáis.
1.En la cocina…
La alimentación juega un papel muy importante para mantener las defensas altas. Por eso, el mejor consejo es que mantengas una dieta variada y equilibrada donde predomine el consumo de alimentos frescos y ricos en vitaminas y minerales.
Además, al igual que existen algunos alimentos que no son beneficiosos para nuestro sistema inmune, hay otros que consiguen subir nuestras defensas, como son:
- Aceite de oliva
- Ajo
- Frutas y verduras crudas
- Otros alimentos como: cebolla, zanahoria, calabaza, miel, tomates y pescado
2.En el baño…
Es posible que no lo hayas escuchado nunca, pero apostar por baños de temperatura alterna (frío-calor) hará que tu circulación sanguínea se estimule y fortalezca tu organismo.
3.En tu vida diaria…
Hacer deporte y descansar bien juegan un gran papel en tus defensas, así que recuerda: practica un poco de ejercicio al día y duerme 7-8 horas mínimo. Tu cuerpo te lo agradecerá.
Además, está demostrado que existe un vínculo entre altos niveles de estrés y la supresión del sistema inmune y la bajada de defensas, por lo que te recomendamos que intentes controlar el estrés para que no te afecte al organismo.
Si, a pesar de seguir todos estos consejos, eres propenso a caer enfermo por una bajada de defensas, siempre puedes echar mano de algún complemento alimenticio en forma de ampollas, cápsulas, jarabe… En la farmacia contamos con una gran variedad de ellos para ayudarte en lo que necesites. ¡Pregúntanos!
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